Es evidente que para ser monitor de gimnasio se deben cumplir ciertas características físicas, sobre todo, y como es de esperar, estar en forma. No obstante, no basta con que te guste hacer deporte o te mantengas en línea, sino que debes tener muy claro cómo instruir a otros para poder alcanzar sus metas fitness. No es fácil conseguir un alto nivel para poder hacer de esto tu carrera, pues ten en cuenta que se trata de un sector de la salud muy importante, en el que se ha de saber muy bien qué se está haciendo y cómo para evitar que tus clientes sufran lesiones de cualquier tipo.
En este artículo te explicamos todo lo que necesitas saber para ser monitor de gimnasio, y si lo que te interesa, además, es formarte por cuenta propia o montar tu propio gimnasio, te damos también algunos consejos para conseguir tus objetivos de forma rápida, segura y estable. ¡Sigue leyendo!
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¿Qué se necesita para ser monitor de gimnasio? Requisitos y cursos
Si bien es cierto que hay carreras y módulos de formación superior orientados a esta carrera, no es imprescindible que cuentes con este tipo de formación. Sí será necesario contar con algunos títulos, pero no tendrás que preocuparte si no cuentas con cuatro años de carrera más un máster, pues puedes dominar esta disciplina sin necesidad de invertir todo tu tiempo en formarte: podrás hacerlo también a partir de la experiencia que adquieras como monitor. Eso sí, sí se valorará de forma positiva tu formación en musculación y anatomía, además de que en cuestiones básicas como los estiramientos a llevar a cabo, los mejores calentamientos y la prevención y tratamiento de lesiones deportivas.
Más allá de esto, un monitor de gimnasio puede estar especializado en múltiples disciplinas, por lo que lo que más van a buscar desde las empresas es alguien con formación específica. Esto es, está bien haber tocado más de una modalidad, pero a la hora de la verdad los puestos de trabajo están orientados a monitores de actividades concretas, como sala de musculación, zumba, yoga, etc. Así pues, aunque es necesario que cuentes con una formación más general para poder cubrir otras actividades en caso de necesidad, lo ideal es que te especialices en el área que más te interese.
Además, si quieres ser instructor de sala debes conocer a la perfección el uso y funcionamiento de todas las máquinas. No es raro encontrar a personas que empiezan en el gimnasio no sabiendo bien cómo utilizar algunos de los aparatos que el centro pone a su disposición, de modo que tu labor implica también asegurarte de que los miembros del gimnasio sacan provecho de su suscripción y, de paso, no se lesionan utilizando una máquina de forma inadecuada. Además de contar con experiencia propia a fuerza de haber ido tú mismo al gimnasio y tener práctica, también viene bien practicar en casa para poder adecuar cada ejercicio al usuario que te lo solicite. En este campo es experto el equipo de FitnessTech, una tienda online especializada en la venta de productos fitness que, de hecho, ofrecen máquinas y accesorios tanto para gimnasios como para particulares.
Si hay alguna máquina que no sepas bien cómo utilizar, o sea nueva y tengas que aprender su uso desde cero, lo ideal es contactar con FitnessTech para que te dé las indicaciones apropiadas para manipularla. Asimismo, para tu formación particular, si todavía no has accedido a un puesto fijo en un gimnasio que te permita utilizar sus recursos para formarte, es que equipes un gimnasio en casa con las máquinas esenciales, especialmente en aquellas en las que te has especializado. Esto te permitirá conocer de cerca las instalaciones con las que trabajarás más adelante, y, además, si en algún momento tienes interés en formar tu propio gimnasio, ya tendrás una referencia clara del tipo de equipamiento que necesitas para empezar y de un proveedor de confianza al que recurrir.
Funciones de un monitor de gimnasio
Las funciones de un monitor de gimnasio abarcan principalmente dos actividades: programar, preparar y ejecutar las actividades deportivas que tenga asignadas dada su especialidad; y asesorar a los clientes sobre las prácticas que están realizando, a fin de que las lleven a cabo de forma óptima y segura.
Si además de monitor de sala eres también profesor de alguna actividad en concreto, como puede ser kickboxing, body pump o yoga, por ejemplo, tendrás que incorporar tus clases dentro del horario del gimnasio y adaptarte a las necesidades del centro para poder impartirlas a diferentes grupos. Además, es probable que tengas que programar también actividades diferentes a tu especialidad, pues cabe la posibilidad de que tu formación se acerque lo bastante a otra actividad deportiva que puedas impartir tú: dependerá siempre de la formación con la que cuentes. Programar dichas actividades implica poner en común los horarios con el resto del equipo, preparar la clase y llevarla a cabo, haciendo un seguimiento de los alumnos para conseguir que mejoren.
A esto último se ha de sumar, asimismo, las actividades que debes realizar fuera de tu horario de clases, ya que las clases rara vez irán seguidas y tendrás que ocupar tu tiempo en asesorar a otros miembros del gimnasio que no estén llevando a cabo ninguna clase en particular.
¿Cuánto cobra un monitor de gimnasio?
La media de sueldo de un monitor de gimnasio es de diez euros por hora, lo que, en función de las horas que se te asignen en el gimnasio como jornada laboral, se traduce en un sueldo de unos 900 y 1000€. No obstante, depende de muchos factores: si se trata de un trabajo de pocas horas y solo das unas pocas clases a la semana es posible que ganes muy poco dinero solo con esta actividad, o bien puedes trabajar en un centro de mayor renombre cuyo salario por horas sea mayor a ese y, además, tenga una metodología distinta de reparto de trabajo. En cualquier caso, se trata sin lugar a dudas de un puesto en el que el salario depende de muchos factores y no hay una media establecida clara, sino que va en función de tus condiciones particulares.
